sábado, 22 de octubre de 2016

Con-sentir

Deja de querer curarte, arreglarte, mejorarte
deja de intentar darle ¨avance rápido¨a la película de tu vida
deja de intentar (el famoso y tan de moda ) ¨soltar¨
La sanación no es un destino al que llegar.
Estate aquí, permanece aquí.
Tus dolores, tus penas, tus dudas, tus nostalgias,
tus temores, tus aburrimientos, tus distracciones…
ninguno es un error
y no están pidiendo ser curados.
Están pidiendo ser sostenidos y abrazados
aquí, ahora
en los brazos amorosos de tu presencia 
Jeff Foster


Algunas veces, las cosas que planeaste no te salen. Y el trabajo es despedirse de esos planes y no tratar de nadar tan esforzadamente contra una corriente que por alguna razón que no alcanzás a comprender, va para un lado distinto al que vos quisieras.
Por suerte, en medio de esas cuantas cosas que no te salen, alguna te sale, y eso es digno de celebrarse.

Ayer, coincidiendo con el día de La Escucha, tuvimos el último encuentro del taller de los viernes de esta segunda mitad del año. Un taller que gracias a la valentía, las ganas y la riqueza de tantas mujeres, ¨salió¨, y lo celebro con alegría.

Un taller en el que, encuentro a encuentro fuimos practicando hacerle lugar a cada pedacito de vida que latía en nosotras. 
Un taller en el que la escucha atenta, del cuerpo, de las emociones, de las sensaciones sentidas, de la experiencia, fue la protagonista. 
Cinco viernes en los que tuvimos el coraje de ofrecernos tiempo, disponibilidad, mirada amorosa, cercanía, respeto, sostén, abrazo y contacto que alivia y acompaña a caminar y a crecer. 
Porque detenerse a practicar requiere coraje, si, y decisión. 
Y eso hicieron estas mujeres a las que admiro y agradezco.
Tomaron la decisión, se animaron a hacer cada viernes una pausa para encontrarse con lo que no siempre es fácil encontrarse.
Se animaron a recorrer un camino posible, a recordar una forma de estar en contacto sin hundirse y sin huir. Se animaron a quedarse, atentas, despiertas; y quedándose encontraron el manantial que desde siempre está ahí disponible, manantial de aceptación, presencia y amor incondicional. 
Juntas hicimos durante esas horas, la experiencia de vivir ¨con-sintiendo¨: Diciendo Si a lo que es, sintiendo-con aquello que en nosotros siente.
Juntas detuvimos por un rato la guerra con nosotras mismas en la que tantas veces nos perdemos, y disfrutamos la experiencia de vivir en la amistad y la bienvenida.
Nos regalamos mirada, abrazo y escucha respetuosa. ¨Elongamos¨el músculo de la atención y del corazón, profundizando y ampliando nuestra capacidad de empatizar y acompañar.
Gracias fue la palabra que circuló en el último rato y el abrazo el gesto privilegiado con el que nos despedimos hasta que la vida nos vuelva a cruzar. Una vida que sabemos se puede vivir con los ojos abiertos, los sentidos atentos, y el amor dispuesto y desplegándose cada día un poquito más.




2 comentarios:

  1. "Dejá de querer curarte, arreglarte, mejorarte..." Muy buenas palabras, Flor!! Beso enorme
    Ber

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    1. un abrazo Ber, que lindo saber que anduviste por acá!

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