¨You have everything at hand. It´s not an impossible task to make the world a better place. Indeed, it´s an everyday job. We start by simply taking a look¨.
K. Maezen Miller
Vuelvo a nacer a cada instante,
si me doy cuenta.
Vuelvo a nacer cuando cada mañana, al despertar,
a pesar de los achaques matutinos,
me puedo levantar, y mi cuerpo de a poquito va entrando en ritmo.
Y doy gracias por un día más.
Vuelvo a nacer cuando en la primera penumbra de la mañana, prendo una vela,
abro mi cuaderno y dejo que las palabras me vayan diciendo.
Cuando abro la puerta de la cocina, veo el cielo y respiro este aire.
Cuando sin prender la luz todavía,
pongo la pava para el mate de marido y el primer te de mi mañana.
Vuelvo a nacer al preparar las viandas para el colegio de mis hijas,
y mientras espero el agua, cuelgo la ropa húmeda en el tender.
Vuelvo a nacer cuando pongo alguna esencia en el hornito del consultorio
y recibo a cada persona que va llegando.
En cada rato libre en el que me siento al solcito a leer o preparar los talleres,
esos que me vuelven a la vida en cada encuentro.
Vuelvo a nacer con cada renglón de algún libro que me atrapa,
con cada pequeño brote de mi jardín,
con cada día de sol y cada tormenta.
Vuelvo a nacer cada feriado, cuando puedo dormir un rato más
y quedarme leyendo o escribiendo en la cama.
En cada caminata,
en cada charla con alguna amiga,
en cada preciado momento de soledad.
Vuelvo a nacer en cada disculpa que pido y es aceptada,
en cada abrazo, en cada lágrima.
En cada gesto de amor por alguien,
y en cada gesto de amor que otros tienen para mi.
Vuelvo a nacer cada tarde, cuando termina el día laboral,
y disfruto del regalo de estar en casa con mis hijos,
de cocinar mientras escucho música,
y abrazar a marido cuando llega del trabajo.
Cuando me hago un ratito para cuidarme y hacer algunos ejercicios de yoga,
con linda música y otra vez mi velita encendida,
cuando el agua calentita de la ducha corre por mi cuerpo cansado.
Vuelvo a nacer cuando alguno de mis hijos pone la mesa,
o me ofrece ayuda para hacer la ensalada,
cuando me cuentan las peripecias de su día en el colegio o en la facultad,
cuando los escucho cantar y tocar la guitarra.
Vuelvo a nacer en cada comida, en cada momento compartido,
en cada reconciliación.
Vuelvo a nacer en este instante, mientras escribo
y por mi ventana veo el sauce, y el sol.
¨Y quiero decir que esto es asombrosamente suficiente¨
¨And I want to say that
this is enough. I want to say that this is astonishing enough-the
actual earth, the extraordinary fact of the ticking, smashing, singing,
whistling, peeping earth-to make me think that I live in a sacred place
and time. I want to say that there is a secular sacred...¨
K. Dean Moore
Genia!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminargracias
un beso grande y pascual
MS
Un abrazo!!!
EliminarLindísimo, Flor!!! Tengo la misma sensación...y a veces me maravillo y me parece mágico eso de que, de golpe, sin proponérmelo y en medio de lo rutinario, lo no tan lindo, lo medio preocupante...vuelvo a nacer!!!
ResponderEliminarFelices Pascuas!!!! Besote. Ber
Beso ber! Gracias por pasar
EliminarQue preciosa vida.... que precioso poder ver eso o ser tan conciente de cada una de tooooodas las cosas que nos pasan en el dia... suenan lindas.. beso, Geor, la amiga!
ResponderEliminarCreo que ser conciente es en parte lo que las hace lindas. Me gusta esa frase que dice que no vemos las cosas como son. Las vemos como somos
EliminarBeso amigueta