Canciones que nos traen de regreso

Hay una historia que dice que en el oeste de Africa, se cuenta el cumpleaños de un niño, el día que fué pensado por primera vez en la mente y el corazón de sus padres.
Ese día, la mujer va, se sienta bajo un árbol y quietamente espera y escucha hasta que pueda oír la canción de su hijito o hijita.
Cuando la ha escuchado, vuelve a la villa y se la enseña a su marido, para que puedan cantarla cuando hacen el amor.
Cuando está embarazada se la cantan a la panza, y se la enseñan a la partera para que puedan cantarla cuando nace el bebé-
Todos los vecinos y parientes la aprenden, así cuando el bebé se lastima o está cansado, le hacen upa, lo sostienen en sus brazos y se la cantan.
También es cantada en cada rito de pasaje, cuando se casa, y finalmente cuando está por morir.
 

Para el último encuentro de un taller que estuve dando en éstos días, les pedí a las integrantes del grupo, que eligieran alguna canción, una entre seguramente tantas, que fuera, de alguna manera,
¨especial¨, por ser inspiradora, o descanso, o calma en las tormentas. Canción que al oírla o al cantarla, las hiciera sentir en casa, en presencia de eso que no es fácil de describir con palabras, en ese lugar de sostén, latido, fuerza vital, fuego sagrado, aceptación, bienvenida.
Canción del ¨ésta soy, y está bien así¨.
Se armó una listita interesante, variada y conmovedora. No se si es por saber que para alguien querido una canción significa tanto, o porque son canciones especialmente lindas, pero todas, de alguna forma, sorprendentemente, me hicieron sentir en casa.
Y entonces pensé que quizás sea porque cuando estamos en casa, bien parados en ese lugar blandito, vulnerable y vivo, invitamos, casi sin darnos cuenta, a los que se acercan, a volver a casa. Y mi casa es tu casa y en la tuya me siento como en casa. Dejamos que la música nos vaya trayendo de regreso
y festejamos juntos que esto que somos es suficiente.
Bailamos, caminamos, escuchamos dejándonos bañar por la bendita luz en la ventana, nos acunamos y abrazamos, respiramos en la quietud dejándonos envolver por la gratitud de haber vuelto a casa, y la confianza de que lo difícil pasará.
Gracias les doy a estas mujeres y a sus canciones, por invitarme y ayudarme una y otra vez, a volver a casa, a reunirme conmigo, a reconocer, calmar, descansar y aceptar.
Y a recordar que aunque todavía haya cosas que se ponen patas arriba cada tanto, hay mucho y muy valioso para cuidar y celebrar.

Yo elegí Sanar, de Jorge Drexler, hay alguna canción que a vos te haga sentir que volvés a casa?